El Camino se ha convertido en una de las mejores formas de confrontarse con la soledad, de atreverse a estar con uno mismo. Muchas personas que siempre han vivido con otros o temido la soledad, encuentran allí un lugar donde poner a prueba sus miedos: ¡y la verdad es que todos dicen haber salido victoriosos! Pero también hay muchas personas que lo han iniciado en grupo y dicen haber mejorado o profundizado en sus lazos de amistad, familiares o de pareja, al hacer el Camino con ellos.
Hacer el Camino solo o acompañado es, así pues, una decisión muy personal, a veces una imposición de la vida o de ciertas circunstancias. Por eso, lejos de dar consejos sobre qué hacer, queremos simplemente analizar algunas ventajas y desventajas más bien prácticas de las dos situaciones.
PROS Y CONTRAS DE HACER EL CAMINO SOLO
Hacer el Camino solo tiene la ventaja de la independencia. Puedes hacer lo que quieras, tomar tú mismo las decisiones de cuándo o cómo partir, al inicio y cada día del Camino en función de tus propias condiciones físicas, cómo has pasado la noche… Tú decides también el tipo de alojamiento, dónde comer… Además, si lo que te ha llevado al Camino exige una reflexión, sin duda podrás reflexionar y meditar más y mejor partiendo solo.
Pero, desde luego, una de las grandes ventajas de partir sólo es que, según dicen casi todos los peregrinos, eso te abre mucho más al encuentro contingente con los otros, a hacer nuevas amistades y conocer a otras personas. Algunos peregrinos con mucha experiencia, afirman que quien va al Camino solo encuentra siempre a quién busca: amigos, pareja…
Respecto a los contras. Más que de inconvenientes reales, suele tratarse de aspectos y resistencias de nuestro propio carácter, como el miedo. En el Camino nunca se está solo, siempre habrá gente dispuesta a charlar o ayudarte, tanto entre los peregrinos como entre los vecinos de los lugares a través de los que caminas. Eso sí, hace falta un poco de confianza en los otros. ¿La tienes? Muchos peregrinos dicen haberse ido solos al Camino precisamente para recuperar su confianza en los demás, y también en este tema parece que el Camino es una buena experiencia.
En fin, hay quien piensa en situaciones de peligro y emergencia, o en la posibilidad de perderse a pesar de la abundante señalización, pero, como hemos dicho, es difícil que quien hace el Camino no cuente con la ayuda de otros peregrinos. Además, hoy día la tecnología bien de forma casi inmediata en nuestra ayuda. Se podría decir que el uso de la tecnología en el Camino estará en función de los miedos y apoyos que el peregrino tenga o necesite en ese momento.
PROS Y CONTRAS DE HACER EL CAMINO CON OTROS
Iniciar el Camino con tus amigos, pareja o familia, puede ser un modo asegurar la diversión y el sentirse protegido desde el inicio. Se garantiza la posibilidad de conversar con los otros, de profundizar en los lazos con ellos, la alegría de estar juntos. Y, ciertamente, como decíamos, los temores de perderse o sufrir un contratiempo -que como también hemos dicho suelen ser más imaginarios que reales- desaparecen.
Pero caminar con los tuyos puede también tener inconvenientes, pues no permite que un peregrino siga su propia iniciativa, su propio ritmo físico. Las metas diarias deben ser definidas por el grupo: cuándo salir, hasta dónde caminar, dónde y a qué hora comer o dormir. Consensuar es difícil y, además, en el Camino el estado físico de los peregrinos puede ser diferente y exigir diferentes tramos cada día. Y claro, tratando de consensuar, es también fácil que la alegría del Camino acabe convirtiéndose en discusiones…
UNA REFLEXIÓN
Así las cosas, elegir hacer el Camino solo o en compañía requiere que el peregrino valore todos los pros y contras, pero, ciertamente, lo fundamental es tener en cuenta la situación personal, la realidad de cada uno en ese momento. Sólo el peregrino que organiza su Camino sabe lo que busca y desea en ese momento: tranquilidad, soledad para reflexionar, la posibilidad del encuentro con desconocidos, o de profundizar en su relación de pareja, estrechar el lazo con su hijo o su hija, pasar finalmente mucho tiempo con sus amigos… Además, cada uno debe evaluar sus fuerzas y miedos en el caso de elegir ir solo, y, de hacerlo con otros, el carácter y la relación que mantiene con ellos.
Puedes encontrar otros peregrinos o peregrinas en el grupo de Facebook: https://www.facebook.com/groups/compartetucamino/
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